Nelson Llanos Sierra
pp.: 1-25
Reconociendo que la prensa es un factor clave en las relaciones internacionales, algunos académicos han estudiado diarios peruanos y chilenos para explicar la cuestión de Tacna y Arica durante los 1920’s. Aunque Estados Unidos participó activamente en dicha disputa internacional, los diarios de ese país no han sido estudiados. El presente artículo analiza cómo y por qué el New York Times y el Washington Post se involucraron en la controversia. Se sugiere que ambos diarios desempeñaron un rol activo durante la preparación del plebiscito de Tacna y Arica, asumiendo una posición contraria a los intereses chilenos, a fin de salvaguardar el prestigio e influencia internacional de Estados Unidos.
Eddie Morales Piña
pp.: 26-34
La siguiente aproximación en torno al escritor Francisco Coloane tiene por finalidad insertarlo dentro de la Vulgata antártica como un representante de la literatura chilena que ha tenido como referente el continente inhóspito en su labor creativa.
Mauricio Jara Fernández
pp.: 35-53
Al poco tiempo de concluido con el Perú la suscripción de un tratado que determinó el destino final de las provincias de Tacna y Arica, el gobierno de Carlos Ibáñez del Campo hizo frente a una dilatada y controvertida cuestión sobre la tenencia de la tierra en la zona patagónica y de Magallanes. Para tales efectos, se comisionó al Ministro Edecio Torreblanca White para que hiciera una visita de inspección al Territorio de Magallanes y recabara ‘in situ’ mayores informaciones sobre la problemática que subsistía y que la Ley Nº 601 de 14 de octubre de 1925 no había podido corregir. Analizar en base a informaciones periodísticas de Punta Arenas, las diligencias y peticiones recabadas por el Ministro a fines de 1930 constituye el principal objetivo de este trabajo. Hay que hacer notar que para el mejor cumplimiento y éxito de esta Comisión a la región austral, el Presidente Ibáñez entregó instrucciones al Intendente de Magallanes e informó al gobierno argentino de las próximas actividades del Ministro Torreblanca y acompañantes en la zona. La idea de comunicar al país trasandino sobre esta inspección oficial era para evitar especulaciones futuras y para no dejarse llevar por erróneas interpretaciones que pudieran entonces menoscabar las relaciones bilaterales.