Resumen

A pesar de hallarse en su exilio en Nueva York, el escritor cubano Reinaldo Arenas no abandonó el uso de materiales narrativos vinculados a la experiencia del disidente revolucionario. Muestra de ello es Arturo, la estrella más brillante escrita en 1971, pero publicada ya en el destierro en 1984 donde el cubano convierte en texto la experiencia homófoba basada en la vivencia de su colega Nelson Rodríguez en uno de los campamentos para homosexuales auspiciados por el estado socialista. En el artículo se examina pues el valor testimonial de la obra así como el imaginario homófobo heredado de las biopolíticas del capitalismo europeo presente en esta.